Legalización de notas

Me llevó más de un año obtener en Venezuela las nuevas constancias de notas de los estudios de primaria y bachillerato de mi hijo. Tan solo porque habían cambiado el formato y la anterior certificación ya no servía.  Primero fueron casi siete meses, para las correspondientes a los grados y años cursados en La Guaira. Luego cinco meses más para el último año, que estudió en Barcelona.

Hace una semana, después de añísimos sin pasar por allí, tuve necesidad de visitar el Ministerio de Educación, en Caracas, para la certificación de esas notas, que mi hijo necesita para su homologación del título de bachiller venezolano por el español. Fui preparado para lo peor, que era la espera de varios días, o semanas. Pero, aunque no lo crean, no fue así.

Mi primera sorpresa fue que, los timbres fiscales que se necesitaban, los vendían en la propia planta baja del Ministerio de Educación, al lado mismo del departamento de Certificaciones. Supongo que sabrán el alivio que eso me produjo, la caminata y tiempo que me ahorró.

La segunda sorpresa fue cuando me dijeron que me sentara afuera y esperara. Pensé que sería mientras realizaban una verificación de los datos y notas, o algo así. Pero se imaginarán mi «cara interna» de asombro -la externa no suelo dejar que refleje esas emociones- cuando, unos diez minutos más tarde, me llamaron y entregaron las dos certificaciones. ¡Me dio tiempo hasta de salir corriendo para Relaciones Exteriores, en la Esquina de Carmelitas, y presentar los documentos para la Apostilla de la Haya! A la tarde siguiente retiré el documento. ¡En 48 horas había solucionado el asunto, con un solo viaje a Caracas!

Al pan, pan; y al vino, vino; que todo hay que decirlo. Cuando algo funciona bien hay que reconocerlo. Y así como mencioné todos los meses que, injustificadamente, se tardaron para emitirme las dos notas, debo alabar la presteza con que me las legalizaron. ¡Por fin pegamos una!

Esta entrada ha sido publicada en Venezuela y etiquetada como . Guarda el enlace permanente.

Una respuesta en “Legalización de notas

  1. Bienestar para tí. Qué noble eres en reconocerlo a pesar de no estar de acuerdo con muchas de las cosas que se viven en Venezuela. Me alegro por tí y por muchas otras personas, que seguro, han sido atendidas oportunamente en ese aspecto.

    Un abrazo alegre y saludable!

Los comentarios están cerrados.