Algo de paranoia puede ser saludable

espias en los ordenadores¿Permitirías que, a través de Internet, tu jefe revisara el contenido de tu ordenador y encontrara esas fotos, correspondencia o sesiones de chateo comprometedoras? De hecho, ¿permitirías que cualquiera, mirase todo lo que tienes guardado en él?

Si has respondido que no, debieras replantearte la pregunta y reconsiderar la respuesta. ¿Estas seguro de que ya no lo estas permitiendo?

Cada día utilizamos más aplicaciones informáticas que, por su propia voluntad, (o la de sus desarrolladores) cada vez que enciendes tu ordenador o pretendes utilizar el programa, realizan un acceso a Internet para «comunicar» con su web matriz. O por lo menos lo intentan, ya que si tienes instalados programas cortafuegos, anti-spyware o similares, podrán avisarte de esos intentos y serás tú mismo quien decidirá si permites o no esa conexión. Pero la duda, y yo diría que razonable, que nos queda, es si solo están comunicando para informar que están siendo usados y revisar la existencia de una nueva versión para actualizarse, o si, además, ha recopilado información adicional guardada en nuestro ordenador y la está retransmitiendo.

¿Ideas un tanto paranoicas sobre seguridad? Quizás. ¿Pero, en algunos casos, a quien no le queda esa duda? Me explico.

Esos programas y servicios utilitarios.

Hay programas utilitarios que, gratuitamente, nos prestan importantes servicios en nuestros ordenadores. Está el caso de Filehippo y Apphit, de los que hablé en el tema anterior, que una vez instalados escanean nuestro PC para ver la versión de los programas que utilizamos, y nos avisan si existen versiones nuevas que descargar.

También hay sitios web desde los que se ofrece, vía online, escanear los archivos en nuestro ordenador para otras funciones, como búsquedas de archivos que no encontramos, o en detección de virus, rootkits y malware en general. Algunos son servicios gratuitos de prestigiosas casas como, por ejemplo, Panda Security.

Comunicando… ¿qué?.

El hecho es que, cuando ese software, bien sea que lo hayamos instalado o que actúe a través de un servicio online, revisa todo el contenido de nuestra PC o laptop y se entera de todo lo que hay allí. Ahora bien, que supuestamente lo haga con la idea exclusiva y excluyente de buscar virus o aplicaciones, «únicamente», es el punto álgido. Porque el punto crítico es que, después de hacerlo, se comunicarán con su web matriz, para comparar la información obtenida en nuestro entorno con la de su base de datos, a efectos de determinar que versiones del software que utilizamos tienen actualizaciones que podamos descargar, o que virus han encontrado, según sea el caso

Aquí es donde yo me pregunto ¿qué les impide comunicar toda la información que pudieron haber recopilado, como el archivo de claves sin encriptar que el programa encontró en su escaneo, allí donde creíamos que estaba más escondido? O el del respaldo de las direcciones de correo electrónico de nuestros contactos y clientes; o nuestra contabilidad personal con los datos bancarios, la estructura de costos de los productos que vendemos o cualquier otra información sensible que tengamos guardada y que no nos interesa compartir.

¿Suena extremo? Pues esto ya ha sucedido con programas que terminaron resultando maliciosos, entre ellos algunos que ofrecían liberarnos de virus y troyanos, siendo ellos precisamente los que nos inundaban con ellos, dialers y otros malware similares.

Nuestra propia omisión.

En ocasiones somos nosotros mismos los culpables, porque no leemos el acuerdo de licencia que se presenta como requisito previo para la instalación de los programas, y donde se informa de lo que hace, si instalará cookies de seguimiento o si compartirá nuestros datos de registro con «empresas asociadas», o hará otras cosas más que pudieran no interesarnos. Entiendo que la mayoría de las veces se debe a que la licencia se encuentra en inglés, y quizás no lo dominamos lo suficiente como para enterarnos cabalmente de todos los pormenores. La gran cantidad de texto a leer en muchas licencias, aún en nuestro idioma, es también un disuasivo poderoso. Pero la falta de interés que ponemos, suele ser el motivo principal para esta omisión.

¡Oh, Microsoft!

Puedo recordar también aquella aborrecible y protestada función intrusiva de Windows, impuesta por Microsoft como una actualización crítica de seguridad, que detectaba el software existente en nuestro ordenador, verificaba si disponíamos de la correspondiente licencia de utilización y, en caso contrario, nos bombardeaba con mensajes, notificando que estábamos usando software ilegal. ¿Qué le habrá hecho suponer a Microsoft que yo tenía alguna intención de informarle del software que utilizo? ¿Por qué querría yo beneficiarlo de esa manera, proporcionándole estadísticas que lo pondría en ventaja comercial con respecto a sus competidores?

Informarnos con quienes pueden asesorarnos.

Para evitar las sorpresas desagradables con programas gratuitos fraudulentos, lo mejor es informarse bien sobre ellos, sobre todo en los sitios serios especializados en sus descargas, como pueden ser: MundoPc.net, PCWorld.com, CNET.com y Softonic.com entre algunos otros reconocidos.

Pero es bien cierto que la mayoría de los virus y malware que nos invaden no se originan en los programas que descargamos, sino en los sitios de Internet que visitamos y en el correo electrónico, y al hecho de que la mayoría de los usuarios carecen de los programas de protección necesarios. Si usas SpaywareBlaster bien configurado, basta con que le des un vistazo al módulo de los «Restricted sites» (o sitios de acceso restringido), para que, entre los miles de ellos, veas nombres de lugares que aprovechan errores al escribir la palabra Google, por ejemplo, y otros con el prefijo spy- que intentan aparecer como páginas que ofrecerán protección para tu PC siendo todo lo contrario.

Espías a la carta.

En la actualidad proliferan programas espías para todo; ahora hasta puedes espiar el móvil de tu pareja. Si navegas en Internet y, además, usas Google, ya te cuento sobre privacidad. Yo opino que, a menos que tengas una PC «cerrada», es decir, sin conexión a Internet, si quieres estar realmente seguro de tus datos y de la salud de tu ordenador, algo de paranoia puede ser saludable, pues te hará tomar las medidas preventivas necesarias y mantenerte atento y analítico.

Temas relacionados, en otros medios:

Google te «espía»… si le dejas.
Programas espias

Esta entrada ha sido publicada en Software y tecnología y etiquetada como , , , , . Guarda el enlace permanente.

Una respuesta en “Algo de paranoia puede ser saludable

  1. Oh!! me siento desnuda ante el internet. por algo es que nunca hago transaciones financieras por mi compu.

    Te abrazo con calidez con sensibilidad aún por la reciente partida de mi padre de estas coordenadas terrenales.

Los comentarios están cerrados.