¿Qué tiene de malo ser un ego bloger? ¿No sabes lo que es? Pues no es más que un blog en donde quien en él publica no hace más que hablar de sí mismo y lo maravilloso que es. Como si fuera su abuelita. Pues no tiene nada de malo, porque en un blog personal se puede hablar de lo que quieras, dentro de los límites del respeto. Al fin y al cabo, de egos está lleno el mundo.
Revolviendo por la actualidad blogeril, en actividades o contenidos específicos, es posible encontrar círculos de amistades. Nada tienen de extraño tampoco. Es tan normal como el círculo o peña de los motoristas de las Harley, de los fanáticos de autos como el Corvette, del Ford Mustang o del Camaro, o de las aficionadas a las manualidades, el bordado, crochet y ganchillo.
Por razones personales he tenido que indagar dentro de los blogs de bodas y de las wedding planners, que en España han proliferado en los tres últimos años tanto como la verdolaga. No, no es porque me esté pensando casar, sino porque mi hija me pide algunos trabajillos para su blog Diario de Bodas. Ya ella me había señalado la existencia de ciertos grupos o círculos de amistades dentro de esa temática, personas que ella califica como de chicas adolescentes en el patio del colegio, reunidas en sus corrillos cerrados. Algunas de las cosas que me ha dicho y las reflexiones que ella escribió en el artículo Reflexiones sobre blogs y bodas me han hecho recordar el post que yo escribí en el 2007 indicando cómo poder ganar el Premio 20 Blogs.